
El centrodelantero Facundo Batista arribó este martes a Uruguay para convertirse en nuevo jugador de Peñarol. El viaje del presidente Ignacio Ruglio a México para renovar el préstamo de Leonardo Fernández también sirvió para renovar al plantel aurinegro para el segundo semestre del año.
Batista tiene 25 años, se crio a una cuadra del estadio Jardines del Hipódromo María Mincheff de Lazaroff, sus padres trabajaron en la feria de Piedras Blancas y él mismo trabajó mucho tiempo como feriante.
Primero ayudó a sus padres. Luego montó sus propios puestos en Piedras Blancas y en la feria de Los Piojos. Vendió ropa, calzado y celulares.
En el fútbol, hizo la escuelita en Danubio, el club del que es hincha fanático su padre. Sin embargo, un día discutió con un entrenador y se fue a jugar nada menos que al rival de todas las horas, Defensor Sporting.
Ahí hizo todas las formativas hasta que su empresario, Pablo Bentancur se negó a renovarle el contrato, esperó a que vencuiera el 30 de junio de 2018 y se lo llevó a Chiasso, en la segunda división de Suiza.
Hizo dos goles en 11 partidos y Fabián Coito lo convocó al Sudamericano sub 20 de Chile 2019 donde alternó en el centro del ataque con Darwin Núñez.
Firmó un precontrato con São Paulo, pero cuando el pase se cayó rompió relaciones con Bentancur y se vinculó con el argentino Marcelo Simonian.
En 2019 se fue a jugar a la Serie B de Brasil, a Ponte Preta donde apenas sumó cuatro partidos. La falta de minutos le impidió jugar el Mundial sub 20 de Polonia.
En el segundo semestre de 2019 pasó a Académico Viseu de la segunda división de Portugal. En seis partidos hizo un gol.
En 2020 decidió volver a Uruguay para jugar en Deportivo Maldonado. Fue una de las mejores decisiones de su carrera: hizo 16 goles en 40 partidos y Necaxa se lo llevó a comienzos de 2022.
Ahí anotó 14 tantos en 64 encuentros.
En la temporada 2023-2024 jugó cedido en Querétaro donde marcó dos goles en 18 partidos.
Referí entrevistó a Batista en febrero de 2021 donde el jugador contó su historia de vida, cómo procesó las despiadadas críticas de las redes sociales durante el Sudamericano sub 20 y cómo fue dando pasos en su carrera.
Peñarol gana con su llegada un excelente recambio para Maximiliano Silvera quien sufrió dos lesiones musculares en un primer semestre del año donde tuvo mucha actividad y grandes actuaciones pero donde sus recambios (Matheus Babi y José Neris) no estuvieron a la altura.
Batista juega muy bien de espaldas al arco, es corpulento para fijar a los centrales, tiene buen juego aéreo y sabe con el balón.
Además, y en este Peñarol no es un dato menor, cuenta con el aval del entrenador Diego Aguirre.