Marcelo Gallardo atraviesa su peor momento futbolístico como entrenador de River Plate, en un año en el que los resultados no acompañaron en absoluto, sumado a un mal rendimiento colectivo del equipo y de duros resultados negativos que colmaron la paciencia del hincha y así se lo hizo saber.
La derrota de local ante Sarmiento hizo que el hincha colapse por completo y se haga escuchar en el estadio Monumental, lo que provocó que entonaran la canción "jugadores, la con* de su madre, a ver si ponen huevos que no juegan con nadie".
La peor racha de River Plate en 43 años
Y es que esta derrota en el Monumental ante Sarmiento se suma a la caída, también de local, ante Deportivo Riestra, la dura eliminación ante Palmeiras en cuartos de final de la Copa Libertadores, la derrota ante Atlético Tucumán y Rosario Central. Esto se traduce en seis derrotas en los últimos siete partido, su peor racha en 43 años.
De los últimos 7 compromisos que tuvo River Plate, únicamente ganó ante Racing Club en los cuartos de final de la Copa Argentina, competencia que está obligado a ganar ya que otorga el acceso directo a la Copa Libertadores del próximo año. Un detalle a tener en cuenta es que, de momento, en la tabla anual se encuentra en puestos de repechaje.
Esta última seguidilla de resultados negativos, se agrega a la inversión de casi 60 millones de dólares que hizo el club para reforzar el equipo y ningún jugador estuvo a la altura.
Además, se agrega que en el Torneo Apertura en la primera parte del año quedó eliminado en cuartos de final en el Monumental ante Platense, perdió la final de la Supercopa Internacional contra Talleres y no logró pasar la fase de grupos del Mundial de Clubes cuando era accesible.
El futuro de Marcelo Gallardo
Ya en el último tiempo son más los hinchas de River que comienzan a pedir la renuncia de Gallardo o que, al menos, se plantean su salida. Lo cierto es que Gallardo tiene contrato hasta diciembre de 2026 y la recta final de este año será clave, ya que aún puede ganar la Copa Argentina, el Torneo Clausura y el superclásico ante Boca Juniors también puede ser vital.

"Yo me pongo objetivos todo el tiempo, no vengo a vivir gratis acá. ¿Tengo una espalda gigante? No. Haber vivido lo que hemos vivido me identifica con la gente. Después, los objetivos... Uno no viene a vivir del pasado acá. Podía haber vivido del pasado en mi casa, disfrutando de la vida. No tengo problema en admitirlo: me gustan los desafíos. Mi desafío es permanente, como persona, entrenador, y eso me alimenta. Y por eso esta adversidad no me hace claudicar. Hay que reconocer que no estamos bien y seguir. Si tenemos los argumentos, hay que mostrarlos. Por ahora, las cosas están sobre la mesa. Tendremos que hacer otros méritos" destacó en conferencia de prensa.
Noticia rastreada 14 de octubre 2025 - 14:15 CET @bostero.dev
