El juego entre el Palmeiras de Brasil y el Al Ahly de Egipto fue reanudado este jueves tras casi cincuenta minutos de suspensión debido a una alerta por posible tormenta eléctrica en East Rutherford, Nueva Jersey, local del partido de la segunda jornada del Grupo A del Mundial de Clubes.
Se trata del tercer partido demorado por tormentas en lo que va del torneo que comenzó el 14 de junio en Estados Unidos, donde los protocolos para este tipo de situaciones se respetan a rajatabla.
El choque fue suspendido este jueves cuatro minutos después de que el delantero argentino José Manuel López anotara el 2-0, en el 58, para el cuadro de Sao Paulo en el MetLife Stadium, donde tras la orden del juez central Anthony Taylor los jugadores abandonaron el campo.
Posteriormente los miles de aficionados que asistieron al estadio, que albergará la final del torneo el 13 de julio, se retiraron de las gradas.
Antes de ordenar el retiro inmediato de los futbolistas, el juez británico enseñó las nubes que se acercaban al recinto al entrenador del Verdão, el portugués Abel Ferreira.
Luego de casi cincuenta minutos, Taylor reanudó el partido, que antes del parón se desarrollaba bajo un sol abrasador, con las tribunas otra vez colmadas por miles de espectadores de ambos equipos.
Palmeiras de Brasil resolvió sus problemas de definición y se acercó a los octavos de final al vencer 2-0.
"Ese tipo de pausas favorece a quien va ganando"
El centrodelantero Wessam Abou Ali, internacional palestino de los Diablos Rojos, abrió la cuenta con un gol en contra en el minuto 49, y el atacante argentino José Manuel López (59) amplió el marcador tras un contragolpe.
Tras la anotación de El Flaco, el choque se suspendió durante casi cincuenta minutos por alerta de tormenta eléctrica, un factor que el entrenador de Palmeiras, Abel Ferreira consideró benéfico para sus dirigidos.
"Ese tipo de pausas favorece a quien va ganando. Si estuviera del otro lado (el del Al Ahly), no me hubiera gustado. Pero en el fútbol todo es posible, y ya he visto remontadas en tres o cuatro minutos", afirmó.
El entrenador portugués, de 46 años, afirmó que trazó la estrategia para el cotejo contra los Diablos Rojos, el club más laureado de la Liga de Campeones de África con 12 títulos, pensando en el calor.
Antes de la suspensión, el juego se desarrollaba en un calor abrasador. La víspera, Ferreira explicó que el clima influye en sus planteamientos. Si hay mucho calor, por ejemplo, juega en bloques compactos para evitar que sus jugadores cubran grandes espacios y se desgasten.
"Es verdad que nosotros usamos eso (estrategias tácticas contra el calor). Mi función como entrenador es sorprender al rival", afirmó.
Protocolos que suspenden todas las actividades
No es la primera vez que un partido del Mundial de Clubes de Estados Unidos es suspendido temporalmente por cuenta de una tormenta eléctrica.
La víspera, por ejemplo, el choque entre el Pachuca de México y el Salzburgo de Austria, en el que los europeos se impusieron 2-1, estuvo detenido durante más de una hora a raíz de una tormenta en Cincinnati.
El duelo en el TQL Stadium de Cincinnati, Ohio, era dominado por los Red Bulls, que se imponían por un 1-0 parcial gracias a un gol del israelí Óscar Gloukh, cuando fue pausado por el referí argelino Mustapha Ghorbal en el minuto 54.
Siguiendo los protocolos, ambos planteles retornaron a los camerinos y las gradas se vaciaron. Minutos después se desató la tormenta. Luego de la espera, las escuadras volvieron al gramado, tuvieron una tolerancia para calentar y después las acciones se reiniciaron.
El martes, el partido donde el Mamelodi Sundowns se impuso por 1-0 al Ulsan Hyundai por el Grupo F, se retrasó poco más de una hora antes del inicio debido a una alerta de tormenta en Orlando.
Los protocolos de seguridad pública en Estados Unidos exigen la suspensión de los eventos deportivos al aire libre durante al menos 30 minutos si se observan rayos o se escuchan truenos.
Noticia rastreada 20 de junio 2025 - 18:00 CET @bostero.dev
