
A los 32 años, Diego Polenta analiza su retiro del fútbol. El capitán de Nacional terminó muy frustrado la temporada en la que corrió de atrás a Peñarol sin poder alcanzarlo nunca en el Campeonato Uruguayo. Además, acusó al juez Hernán Heras de amenazas tras perder la final de la Copa AUF Uruguay y sufrió más que nadie en el plantel el fallecimiento de su compañero Juan Izquierdo.
Luego de 10 años interrumpidos por sus salidas a Olimpia, Los Angeles Galaxy y Unión de Santa Fe, el Patrón cerró la puerta, pasó llave y se fue al campo a meditar.
Tras sus declaraciones del pasado viernes, con la derrota caliente por penales contra Defensor Sporting, todo hacía indicar que el ciclo de Polenta en Nacional está terminado.
Sin embargo, después hizo saber en su entorno que se tomará unas semanas de reflexión.
Su contrato con Nacional vence el 31 de diciembre.
Las elecciones que se llevarán a cabo este sábado en el club también serán claves para su continuidad. Para el oficialismo, donde José Decurnex va por el sillón, Polenta es un líder de vestuario.
Sin embargo, la lista que promueve a Ricardo Vairo y Flavio Perchman ya se pronunció por este último que su continuidad y la de Ruben Bentancourt, serán analizadas, por lo que se dio a entender que en principio no entrarían en el plan de un nuevo Nacional.
¿Qué dicen los números de Polenta en Nacional?
El zaguero llegó al club a mediados de 2014 tras jugar en Genoa y Bari, en Italia. Tenía entonces 22 años.
Le costó varios partidos ponerse en forma para que Álvaro Gutiérrez lo tirara a la cancha en el Apertura 2014 donde Nacional firmó su mejor campaña en torneos cortos: 14 ganados y una sola derrota, ante El Tanque Sisley.
Ganó el Campeonato Uruguayo de su primera temporada, la 2014-2015, el Uruguayo Especial 2016 que fue un torneo corto para equiparar desde 2017 la temporada a año calendario y no volvió a ganar más.
Es decir que de ocho Uruguayos disputados (incluidos el 2018 y 2021 donde solo estuvo un semestre) ganó dos.
Además, perdió las dos finales de Supercopa Uruguaya que le tocó jugar.
En materia de torneos cortos ganó el Apertura 2017, el Intermedio 2017, el Apertura 2018 y el Intermedio 2024. Disputó 15 y ganó esos cuatro, sin contemplar entre los 15 el Uruguayo Especial 2016 ni las Supercopas.
El valor agregado que tuvo el primer Uruguayo que ganó fue que se obtuvo en final clásica ante Peñarol, triunfando 3-2, en alargue.
El gran fuerte de Diego Polenta: jugador de clásicos

Si bien ganó dos títulos grandes, la verdadera huella que Polenta deja en Nacional es en materia de clásicos.
El Patrón disputó 22 de los que ganó 7, empató 13 y solamente perdió 3.
Su influencia en el fútbol uruguayo, y en ese torneo aparte que son los clásicos, queda graficada en el hecho de que se mantuvo invicto en sus primeros 10 partidos ante Peñarol con cinco triunfos, incluida la final por el Uruguayo ganada.
A él se le adjudicaron los tres goles del clásico del Uruguayo Especial 2016 que no se jugó porque la hinchada de Peñarol cometió todo tipo de desmanes previo al partido para impedir que el clásico se jugara. El encuentro se le dio por ganado a Nacional por 3 a 0.
En el primer clásico que perdió, en el Clausura 2017, Fabián Estoyanoff lo fue a buscar a los 32' de juego y por agresiones mutuas ambos vieron la roja de Christian Ferreyra. El manya sacó tajada de su ausencia en cancha y se impuso 2-0.
Desde esa derrota estuvo ocho clásicos sin poder ganar, perdiendo tres consecutivos.
En la Copa Antel 2018 le pegó una patada desleal a Mathías Corujo, de atrás y a la altura de la rodilla, viendo sus segunda expulsión clásica.
Así como tuvo ese mal accionar como colega también tuvo un gesto loable cuando en el clásico del Clausura de 2021 pidió desesperadamente el ingreso de la sanidad para que atendieran a Agustín Álvarez Martínez, delantero de Peñarol, quien había sufrido un choque que le hizo perder el conocimiento.
Le tocó perder la final de la Supercopa Uruguaya 2018, en un clásico donde Nacional la pasó mal ante aquel ritmo aplanador del Peñarol de Leonardo Ramos.
Sin embargo, sus números terminan siendo favorables porque este año Nacional ganó dos de cinco clásicos y en dos empates resultó vencedor por penales, incluida la final del Intermedio donde metió el penal decisivo ante un Washington Aguerre en estado de gracia y luego de que el golero de Peñarol le atajara su primera ejecución.
En el balance de los clásicos, Polenta ganó más del doble de lo que perdió y fue siempre figura de peso en el equipo.
El gran debe de Diego Polenta: sus torneos internacionales
En el rubro internacional, Polenta no logró que Nacional fuera competitivo fuera de fronteras.
Sus primeras dos llaves coperas estuvieron marcadas por expulsiones que condicionaron a su equipo.
En la fase previa de la Copa Libertadores 2015 fue expulsado a los 35' en la ida ante Palestino y Nacional perdió 1-0. En la revancha, sin público de Nacional por una sanción impuesta por Conmebol, el tricolor ganó 2-1 y quedó eliminado al recibir un gol de visitante.
Polenta se superó a sí mismo en la Copa Sudamericana del mismo 2015 donde en duelo contra Independiente Santa Fe se hizo echar a los 3' de juego en el Gran Parque Central. Ese día, los colombianos, dirigidos por Gerardo Pelusso, ganaron 2-0. A Nacional no le alcanzó en la revancha imponiéndose 1-0 en Colombia.
Fue la única Sudamericana que jugó para el bolso.
Su mejor Libertadores fue la 2016 donde Nacional superó el grupo con dos triunfos ante Palmeiras y se cargó al Corinthians de Tite en octavos de final, con un empata 2-2 de visitante tras igualdad a cero de local. En cuartos de final fue eliminado por Boca Juniors por penales tras dos empates 1-1.
En 2017 superó la fase de grupos pero cayó en octavos de final con Botafogo por un global de 3-0.
En 2018 superó la fase previa contra Banfield pero no así el grupo.
En 2023 volvió a quedar afuera con Boca Juniors, por penales, en octavos de final mientras que este año tampoco superó los octavos, cayendo ante São Paulo en la recordada serie marcada por el trágico fallecimiento de Juan Izquierdo, una herida con la que todo Nacional y en especial Polenta, que estuvo muy cerca de la familia del compañero, cargó en la recta final del 2024.
En 39 partidos por Copa Libertadores, Polenta ganó 13, empató 15 y perdió 11. El año pasado marcó su único gol, contra Metropolitanos de Venezuela.
El contrato se termina. El ciclo de Polenta no solo dependerá de la voluntad del jugador si quiere seguir. Hay un presidente por elegir, un proyecto deportivo que montar y un técnico por designar para que Nacional termine adoptando una decisión para un jugador que en los últimos 10 años fue un símbolo del club.
Noticia rastreada 2024/12/11 01:45 CET @bostero.dev